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Experiencias

Los Murales del Colegio Elvira Sullivan

En el Colegio Elvira Sullivan, de Merlo, Provincia de Buenos Aires, trabajan con un proyecto integrador a partir del uso y la creación de imágenes. Paula Bruno y Alicia Martínez – docente y directora de la institución – participaron de los Talleres de formación de Tramas y dan cuenta de la experiencia.

 

La imagen como estrategia pedagógica

El proyecto educativo institucional que lleva más de 13 años de puesta en práctica se caracteriza por destacar cinco ejes de relevancia que operan como orientadores de toda la tarea educativa:

- Educación por el arte

- Cuidado del medio ambiente y el equilibrado balance de lo construido por el hombre

- Identidad en relación con la comunidad

- Convivencia de Calidad

- Excelencia educativa

De los ejes hay tres que se articulan en una actividad-proyecto: Murales Solidarios. Esta es una dinámica de trabajo en la que se conjugan aspectos de la convivencia, el arte y las relaciones con la comunidad.

Si bien en el producto material resultado de la tarea parece que lo que prima es el arte, es el proceso de gestación el que prioriza la convivencia y las relaciones con la comunidad.

Desde el punto de vista de la convivencia, entendemos como tal el trabajo sobre la prevención de la resolución contradictoria o violenta de los conflictos interpersonales. Esto hace lo que en la vieja jerga educativa se denominaba "aspectos disciplinarios", pero que, debido entre otras cosas a la ambigüedad del término, preferimos referirnos de otra manera.

El énfasis tradicional en la disciplina formal ignora todo el "hirviente" mundo afectivo que contiene un grupo. Por eso a veces los grupos estallan, y hasta las instituciones escolares pueden transformarse en un "volcán", cuando no son contempladas, de algún modo, las necesidades, las tensiones y los juegos emocionales que se desencadenan en los grupos. Conscientes de esto y teniendo en cuenta la postura enunciada en el proyecto de nuestro colegio, estamos convencidos que esta es una alternativa de acción pertinente a la tarea de promover el desarrollo de sujetos críticos participativos

Desde el punto de vista del arte, consideramos que éste es una herramienta de transformación social y cultural. A través del trabajo creativo, es posible desarrollar aptitudes que contribuyan a modificar situaciones personales y relaciones sociales. La creatividad no es considerada como un conocimiento más, sino una manera de usar el conocimiento y de aplicarlo para obtener un resultado innovador.

Por lo tanto, dentro de los ejes del Colegio, la educación por el Arte, proporciona un incentivo a la observación, investigación, creatividad y postura crítica ante la vida, fundamental para un desarrollo integral en este momento tan especial de un mundo globalizado.
La tarea consiste en pintar murales en un espacio público o alguna institución (Cooperativas, Escuelas Estatales, Hospitales, etc...) con los alumnos de un curso determinado de la escuela y con la gente del lugar en donde se va a realizar el mural.

Por un lado, la salida a pintar sugiere una organización previa del grupo-curso, propuestas de ideas, selección y decisión de bocetos, intercambio de experiencias con la comunidad o institución destinataria, coordinación con las/los docentes que coordinan la tarea. No se trata de una actividad dirigida desde un modelo autoritario de relación donde se asume que sólo uno sabe y los demás no (aunque esto resultaría seguramente más rápido y "ordenado")

Por el otro, el resultado, el mural, es tan contundente que ellos mismos no pueden creer que sean los autores. Los murales son realizados con y para la gente. El mural es el pretexto para que un conjunto de personas se conforme en un grupo. El realizar un mural plantea en todo momento la singular situación en que se ponen en juego tanto las particularidades y fuerzas de cada uno de los que intervienen, como la permanente presencia del otro, de ver y estar con el otro, reconociéndolo y necesitándolo como tal.

Se reconoce al individuo como un ser único y a la vez se manifiesta en un espacio social que lo identifica y lo estimula. Se trata de reconocer todo el mural como propio pero no "mío" solamente.

Se trabaja con el objetivo de estimular procesos de socialización que permitan la expresión de hasta el más tímido, que aplaquen las ansias desbordantes del más inquieto, que expresen consensos laboriosamente construidos, que privilegien acciones solidarias.

Es importante que estén incluidos todos los alumnos en el grupo al que pertenecen, porque hasta el alumno más indiferente al arte, se modifica en el quehacer grupal y generalmente es el que más se destaca; ese sería nuestro beneficio, ya que volvemos de la tarea con un grupo más unido, valorizado y solidario, más allá de que se tiene otra mirada para esta realidad y se visualiza una manera de sentirse útil.

Salen modificados de las experiencias: hay nuevas amistades dentro del mismo grupo, hay diálogo donde había indiferencia o brinca. Hay sobre todo la posibilidad de mirarse de otra manera, y de mirar al otro y reconocerse en él.

La Imagen en la Tarea Pedagógica

La imagen es así productora y producida, es producto y causa. Nadie se la queda pero todos se la apropian.

Podemos modificar espacios y crecer en la creencia de que el arte, la belleza y la estética son también patrimonio de todos y para todos. De alguna manera, esta creencia es una manera de apropiarnos de las imágenes e identificarnos activamente con ellas, desde su creación.

A partir de lo expuesto, el tratamiento de la imagen no se reduce a la utilización creativa de una imagen ya producida, sino de la producción-gestación de una imagen que expresa acuerdos, identidades, y criterios artísticos de cómo presentar esto de manera bella. Se trata de estimular procesos de simbolización en los jóvenes, procesos que resultan catárticos y que están cada vez más restringidos por la facilidad con que la tecnología construye mundos imaginarios sin dejar nada para completar al espectador.

La realización de lo murales implica varias etapas de trabajo:

- En la primer visita de los alumnos del Colegio E. Sullivan a la institución en

donde se va a pintar el mural, se colectan pedidos de las autoridades, se informa del estado del lugar, paredes, medidas y etc. y también se escuchan sugerencias, pedidos y deseos de todos los interesados en el proyecto.

- Luego de la primera etapa, se reúnen todos los alumnos con los coordinadores y

los alumnos delegados, que informan de los detalles recabados en la visita a la institución para el proyecto de Murales Solidario.

Entre todos se elaboran las estrategias adecuadas para cada situación y lugar en particular, asegurando la conclusión del proyecto, como por ejemplo:

- Con bocetos previamente creados por todo el curso.

- Con bocetos creados conjuntamente con los alumnos del colegio a visitar.

- Con bocetos realizados juntos a los chicos, pero por su corta edad (en el caso de jardines, etc.) serán pasados al muro por el grupo de muralistas.

- Trabajos con docentes y/o padres de la institución solicitante, previa preparación.

- El trabajo con y para la gente de la institución a donde se va, se enmarca en

una práctica a través de talleres abiertos con la consiga "en busca de una imagen".

Se trabaja con la motivación de fotografías y textos literarios con la técnica del collage, para unificar ciertos criterios plásticos y que no quede solo una exposición permanente de trabajos "infantiles". El grupo puede organizar el material dado pero modificable, expresándose en forma espontánea pero no impulsiva, y promover una respuesta sensible e intuitiva, un ir y venir de la materia a la imagen, de lo interno a lo externo y así reconocerse en el producto de la tarea. La modificación de la materia en las propias imágenes posibilita reconocerse como inédito y original, como quién "puede" aún en momentos desesperanzados.

- Luego este proceso se comienza a trabajar en las paredes. En un mural quedan las marcas de todos y de ninguno en particular.

El espacio generado es artístico, cada uno se conecta con sus posibilidades creativas y con las necesidades del grupo, se evita la copia de modelos, estereotipos; se trabaja con ideas propias. Se busca que el producto armonice con su contexto ya que consideramos que la pintura mural es la decoración de arquitectura y cumple con una función. Así, se transforma el espacio por medio del color, el diseño y la limpieza integral, con criterio estético y funcional.

Insertar la actividad cultural en la vida cotidiana y habilitar instancias de participación de la gente en ella, es también una forma de sensibilizar, concientizar y movilizar a la sociedad para una valorización positiva del espacio público. Transformar una apatía o el maltrato hacia el mismo, en una actitud responsable y solidaria, demanda poner en marcha acciones que motiven una apropiación creativa del lugar.

Por último, buscamos retroalimentar este proyecto con los egresados verificando a través de sus experiencias, qué les sirvió, qué cosas facilitaron en su vida de estudiante, de trabajador, de ciudadano, de amigo. Qué les faltó, si bien parece presuntuoso preguntar esto ya que son muchas las cosas que no le da la escuela secundaria, la pregunta apunta más a saber qué cosa sí les podemos ofrecer y no lo estamos haciendo.